Sostenibilidad para mejorar el futuro
La visión catastrófica del futuro no ayuda a los estudiantes a mejorarlo
El mundo en el que nos tocó habitar es complejo y tenemos grandes retos que resolver como humanidad; pero contribuir a las visiones catastrofistas del futuro no ayuda a nuestros estudiantes a mejorarlo. Para ello, es necesario plantearnos acciones positivas de sostenibilidad para mejorar el futuro del planeta.
Con frecuencia escuchamos sobre los problemas que ha provocado la negligencia con la que hemos tratado al planeta y los ecosistemas: el cambio climático, el agotamiento de los recursos naturales o el uso de energía no renovable para todo lo que hacemos.
Si a los educadores nos preocupa, podemos imaginar que en los niños, niñas y jóvenes estudiantes, estas visiones catastróficas producen estrés y ansiedad, lo que puede llevarlos al desinterés y a preguntarse: ¿por qué tendríamos nosotros que resolver los problemas ambientales que nos heredaron?
Entonces, ¿de quién es el problema?, ¿cómo podemos enfrentarlo de una manera positiva, involucrando a nuestros estudiantes en la tarea de mejorar el mundo y alinearnos con los Objetivos del Desarrollo Sostenible?
Uno de los desafíos que tenemos como guías es crear en los alumnos una consciencia de su realidad, pues compartimos un espacio físico en el mundo con personas que pueden haber sido descuidadas con el planeta, probablemente porque no lo sabían o no les importaba; sin embargo, ahora nos toca empezar a mejorar las cosas.
La problemática medioambiental a la que nos enfrentamos hoy en día, nos exige convertir a nuestros estudiantes en solucionadores de problemas y responder a la pregunta: ¿por qué los niños deben ser conscientes sobre problemas como el cambio climático?
Aunque sabemos que estos temas pueden ser pesados para ellos, es importante que todos tengamos conocimientos y sepamos cómo cuidar nuestro planeta, no sólo por nosotros, sino también para dar esperanza a las futuras generaciones. ¿Qué clase de hogar queremos heredar a los demás?
Esther Maughan Mclachlan, responsable de Sostenibilidad de Sony Europa, define un futuro sostenible como aquel donde nos cuidemos a nosotros mismos, a los demás y el mundo natural del que dependemos.
Además, dice que la tecnología puede auxiliarnos en la adopción de una actitud más compasiva con nosotros mismos, y puede hacerlo de distintas formas: al ayudarnos a entender y cuidar mejor la salud de nuestro ecosistema planetario; a vivir de manera menos estresada y con mayor riqueza emocional; y al fomentar el entendimiento y la cercanía entre individuos y naciones.
Para ello, propone tres acciones positivas inmediatas para lograr que la sostenibilidad y la tecnología vayan de la mano en el futuro: limitar el consumismo digital; aprovechar las posibilidades del Internet de las Cosas (IOT) y modificar la filosofía de vida de las personas.
- El consumismo digital y la necesidad de tener más y más dispositivos puede poner en peligro la sostenibilidad del futuro. Por lo tanto, se piensa ya en contar con un sólo dispositivo digital que haga todo, es decir, reducir la cantidad de aparatos y crear uno menos efímero y más versátil.
Si hacemos la tecnología más humana, con un modelo emocional duradero atendido por los servicios de La Nube, evitaríamos querer obtener continuamente modelos nuevos y más avanzados. Esta idea permitiría una reducción del uso de los recursos naturales a nivel global. - Por su parte, el denominado Internet de las Cosas (IOT) está centrado en las plataformas que utilizaremos para tener accesibilidad absoluta, tanto a las personas como a los objetos que nos rodean. ¿Imaginas que tu propia nevera te dijera que debes beber leche para evitar que se caduque o para cuidar tu alimentación? Esto ya está ocurriendo, y en unos años nos permitirá “saber” dónde están los objetos, dispositivos o productos y qué durabilidad tienen, lo que resultará en el ahorro de recursos energéticos.
- La filosofía de vida y las ideas de las personas pueden cambiar con el objetivo de profundizar en la creación de un vínculo entre la productividad, la creatividad, las emociones, la naturaleza y la tecnología.
Desde luego, también hay acciones inmediatas de sostenibilidad para mejorar el futuro que podemos practicar con nuestros estudiantes, desde ser un modelo a seguir al demostrar con acciones la importancia de cuidar el ambiente, hasta la práctica del reciclaje, que resulta muy enriquecedor para el impulso de la cultura maker.
Sabemos que lo que más le gusta a los niños es salir del salón de clases y experimentar su entorno. Por eso es muy útil visitar escenarios naturales y mostrarles cómo cuidarlos y respetarlos. Podrías proponer actividades como crear un huerto o un invernadero escolar, donde aprendan acerca de temas ecológicos de manera divertida y didáctica.
El planeta es de todos nosotros; tenemos la fortuna de poder informarnos y tomar acciones al respecto. Acuérdate de que sólo tenemos este mundo y, por eso, debemos cuidarlo con alegría y optimismo, para que los más pequeños puedan disfrutarlo de la misma manera.
Con información de:
— COMUNICADO: Sony Europe mantiene su compromiso de sostenibilidad climática gracias al ahorro energético.
https://www.elconfidencial.com/mercados/2007-08-10/comunicado-sony-europe-mantiene-su-compromiso-de-sostenibilidad-climatica-gracias-al-ahorro-energetico_1054081/
