La IA en la gestión educativa
La gestión educativa es una tarea crucial para mejorar la experiencia formativa de estudiantes y docentes; sin embargo, sabemos bien que es una labor compleja a la cual necesitamos invertir mucho tiempo.
Afortunadamente, la inteligencia artificial (IA) ha mejorado y se ha vuelto más accesible, a tal punto que podemos apoyarnos en ella para eficientar nuestras labores y así centrarnos en el factor humano, como recomienda la UNESCO.
En este artículo te invitamos a explorar tres formas sencillas para hacer de la IA la mejor aliada en la gestión educativa. ¡No dejes de leer!
La IA permite rastrear patrones y alertarnos sobre dificultades académicas, emocionales e incluso riesgos de deserción. Esto es vital para brindar apoyo con tiempo. De esta manera, puedes planear intervenciones efectivas y personalizadas, además de dar acompañamiento en todo momento.
Gestionar una escuela vuelve prácticamente imposible conocer profundamente a todos los miembros de la comunidad educativa. Pero, gracias a la IA, puedes implementar herramientas que, mediante reportes u otros productos, nos permitan conocer quiénes son, cuáles son sus necesidades, dificultades y gustos. Esto, de la mano de los docentes que los acompañan, favorece el diseño de experiencias personalizadas que los mantengan motivados y aumenten su nivel de compromiso con sus estudios.
Ante tantas tareas administrativas que consumen mucho tiempo, la IA puede ser nuestra gran aliada. Ésta puede intervenir en labores como creación de horarios, seguimiento de asistencias y calificaciones, lo cual liberará a directivos y docentes de tareas repetitivas, permitiéndoles centrarse en lo que más importa: los procesos de enseñanza y aprendizaje, así como el bienestar de la comunidad escolar.
Incluso tareas más especializadas, como la planeación de clases, pueden apoyarse de la IA. Para saber más, te recomendamos nuestro artículo Inteligencia artificial para planear tus clases.
En resumen, la IA es una herramienta poderosa para la gestión educativa. Nos permite, entre otras cosas, prevenir y resolver problemas académicos, personalizar la enseñanza y eliminar tareas repetitivas. Día con día, la tecnología está cambiando la educación de manera positiva. ¡Utilízala y aprovecha su potencial!
Con información de:
EdMachina / Pinion Education / UNESCO / UNIR