Pensamiento computacional para todos

El pensamiento computacional no sólo beneficia a quienes van a seguir una carrera en tecnología

La transformación digital está generando cambios vertiginosos dentro del mercado laboral, de manera que como ciudadanos de la era del conocimiento debemos cuestionarnos constantemente: ¿Estamos preparando a niños, niñas y jóvenes para afrontar los retos del futuro? ¿Cómo transmitir el pensamiento computacional para todos y utilizarlo para transformar nuestro entorno?

Pensamiento computacional para todos

Cabe resaltar que los desafíos laborales que se avecinan conllevan problemas que son globales. Por ello los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS 2030) concentran una serie de retos que deben ser abordados con habilidades para la resolución de problemas. Para desarrollar dichas competencias, una de las herramientas que podemos brindar a nuestros estudiantes es el pensamiento computacional, que ahora es tan fundamental como la competencia matemática.

Cuando hablamos de pensamiento computacional, en primera instancia nos viene a la mente la programación de computadoras, pero en realidad su implementación va mucho más allá de trabajar con ellas, pues el pensamiento computacional permite determinar exactamente cómo resolver problemas de forma metódica, de manera que las computadoras son sólo una herramienta.

Pero ¿por qué es importante el pensamiento computacional? La respuesta parece obvia cuando observamos que en la currícula de prestigiosas universidades se ofertan asignaturas transversales sobre la base de Ciencias de la computación más otros conocimientos (Computer Science + (plus) something), tales como CS + mathematics, CS + molecular biology, CS + economy, CS + urban planning y CS + cognitive science.

La experiencia dicta que una buena implementación del pensamiento computacional permite presentar soluciones a problemas de manera que una computadora, un humano, o bien ambos, puedan entender y seguir paso a paso el proceso para llegar a una solución.

El pensamiento computacional ha cobrado importancia como herramienta para repensar todo lo que nos rodea y tomar decisiones fundamentadas para transformar nuestro entorno. Ya no es solamente una herramienta útil para estudiantes de ingeniería, sino que funciona como un proceso de pensamiento computacional para todos.

Pero, ¿qué es el pensamiento computacional? Si aplicamos el concepto a la cotidianeidad, significa abordar un problema complejo, comprender dicho problema y desarrollar posibles soluciones a partir de cuatro técnicas que son mutuamente dependientes:

  1. Descomposición: dividir el problema complejo en una serie de problemas pequeños que sean más manejables.
  2. Reconocimiento de patrones: buscar similitudes entre los datos de cada pequeño problema y agruparlos.
  3. Abstracción: centrar la atención en la información relevante y en sus diferentes representaciones.
  4. Algoritmos: desarrollar la solución paso a paso para cada pequeño problema hasta dar solución al problema complejo.
Pensamiento computacional para todos

Pensar computacionalmente es una habilidad extremadamente útil que probablemente usamos todos los días. Por ejemplo, se acerca el festejo del fin de año y debes organizar la celebración para tu grupo de amigos. Si a todos les gustan cosas diferentes, tendrán que dialogar sobre:

      • Qué podrían hacer.
      • A dónde podrían ir.
      • Quién quiere hacer qué.
      • Experiencias que han sido un éxito en el pasado.
      • Presupuesto y costo de las opciones.
      • Duración del evento.
      • Tiempo para preparativos.

Al recabar esta información, puedes decidir más fácilmente con tus amigos a dónde ir y qué hacer para disfrutar del festejo con el acuerdo de la mayoría. De igual manera, podrías usar una computadora para recopilar y analizar los datos y encontrar la mejor opción para la fiesta de fin de año, tanto ahora como si vuelves a organizar el evento en el futuro.

Dentro de este ejemplo se ha utilizado el proceso del pensamiento computacional para resolver un problema complejo para muchos de los organizadores:

  1. Descomposición: se plantearon pequeños problemas a considerar (qué hacer, dónde ir).
  2. Reconocimiento de patrones: se consideró la experiencia en eventos anteriores para resaltar similitudes.
  3. Abstracción: se enfatizaron detalles relevantes en otras de sus representaciones (ubicación, clima).
  4. Algoritmos: se elaboró paso a paso la solución de cada pequeño problema hasta obtener el plan para la celebración.

Cuando utilizamos el pensamiento computacional no sólo para organizar una fiesta, sino para buscar soluciones a problemas globales, necesitamos entrenar la capacidad de expresar nuestras ideas utilizando nuevos medios, reconocer que podemos hacer muchas más cosas cuando colaboramos con otros y cuestionar constantemente nuestras creaciones para hacerlas mejores. Por ello el pensamiento computacional beneficia a todas las profesiones.

Si comenzamos a enseñar pensamiento computacional a nuestros estudiantes desde los niveles de educación básica, requerimos como educadores ajustes significativos. Por ello, Pinion espera que los docentes respondan y lideren el cambio educativo. El rol de un guía de Diseño y Tecnología es lograr que nuestros estudiantes inviertan su práctica y pasen de ser consumidores de productos tecnológicos a creadores de tecnología que analizan el funcionamiento de las cosas. Una labor desafiante pero posible.

Dentro de una clase de diseño y tecnología, nuestros estudiantes aprenden a descomponer un problema, encontrar patrones o similitudes y generar soluciones creativas. Por eso es tan importante fomentar el pensamiento computacional también en todos los que no van a seguir una carrera en tecnología, para que parte de su forma de transformar su entorno incluya la creatividad, colaboración y autocrítica, que son perspectivas íntimamente asociadas al pensamiento computacional como hazaña intelectual.