Juguetes tecnológicos y habilidades del futuro
El juego es uno de los protagonistas en el desarrollo de la educación infantil. Hay juegos que favorecen la adquisición de capacidades de carácter cognitivo, social y de comunicación, así como hay una interacción estimulante entre juguetes tecnológicos y habilidades del futuro.
El juego no es sólo placer, se trata de una herramienta de aprendizaje que prepara al niño o la niña para conocerse a sí mismo y al mundo que le rodea. Por ello el “juego es sinónimo de aprendizaje”, nos dice la maestra en educación Beatriz Arroyo Espinosa: “Cuando un menor juega, a su vez está trabajando”, señala.
Muchos pedagogos y educadores, de Piaget a Freire o Montessori, han mostrado cómo el juego nos ayuda a crecer y a apropiarnos de las competencias sociales necesarias para establecer relaciones sanas con los demás. En el juego aprendemos a correr riesgos, defendernos, negociar, experimentar y vivir plenamente la fantasía y la curiosidad.
Los juguetes se corresponden con cada una de las épocas históricas y han ido evolucionando. Los primeros juguetes de la antigüedad fueron huesos de cordero perforados, ubicados en Mesopotamia y Babilonia, así como algunas miniaturas talladas de animales encontradas en el territorio de la antigua Persia.
En Egipto se hallaron pequeñas muñecas de trapo, además de casitas, armas, dados y canicas. En Roma y Grecia hubo pelotas, yoyos y peonzas, así como soldados, juegos de azar, columpios, muñecas de arcilla y vajillas en miniatura, en tanto los árabes introdujeron el juego de Damas y el ajedrez.
En la Edad Media, las muñecas se hicieron con vidrio, y en el Renacimiento se perfeccionaron hasta convertirse en artículo de lujo. Asimismo, había juguetes como caballos, jinetes y canicas de arcilla y los primeros soldaditos de plomo. En el siglo XVI hubo ya juguetes bélicos, muñecas de madera, porcelana y yeso, peluches, soldaditos y los primeros mecanos rudimentarios. En este siglo comenzaron también a fabricarse los primeros juguetes educativos.
Con la Revolución Industrial los juguetes evolucionaron y se extendió su fabricación, así como la de objetos mecánicos, antecedentes de los juguetes tecnológicos. En el siglo XX, el juguete empieza a producirse a gran escala y en serie hasta popularizarse mediante el uso de materiales más económicos. Al mismo tiempo, la publicidad influye y despierta necesidades en niños y niñas.
Frank Horby registró en 1901 el primer juego de Meccano, y a finales de esa década el juguete comenzó a popularizarse hasta industrializarse en los años cuarenta. Hacia mediados de los cincuenta, también llegó el primer juego casero de química, que tendría mucho éxito como “juego científico”. Luego se extendieron diversas formas de mecano y juegos de construcción bajo las marcas Lego y Fisher Price.
A principios del siglo pasado, el inventor Joshua Lionel Cowen creó el primer tren eléctrico de juguete. Más tarde empezaron a producirse juguetes de metal a escala con motor eléctrico y luces. En los años cincuenta se creó la compañía Scalextric, que vendía sus famosos autos y autopistas eléctricas en miniatura.
En los cincuenta se inventaron los videojuegos: William Higginbothan creó el célebre juego de tenis para dos personas. En los sesenta, Steve Russell creó un juego de marcianitos, y ya en 1985, Super Mario Bros se convirtió en el videojuego más popular. Los videojuegos han avanzado exponencialmente y se revolucionan constantemente gracias a la inteligencia artificial.
Los juguetes, siempre parte del desarrollo infantil, nos hacen preguntarnos: ¿Qué regalamos en estas fechas a nuestros chicos y chicas?
Queridos reyes magos, regálenme… ¡Un futuro!
Fin de año, tiempo de reuniones, paz, amor, celebración y… ¡¡REGALOS!! Siendo sinceros: ¿a quién no le gustan los regalos? Y si alguien los disfruta más que nadie son nuestros niños y niñas. Para ellos, esta época está llena de magia e ilusión, sobre todo en el momento en el que despiertan y aparecen los regalos que pidieron (y los que no, también), sin saber que quizá uno de esos regalos cambiará el rumbo de su vida.
Al menos así sucedió conmigo, cuando en lugar de un Nenuco o una Barbie, que se regalaban a las niñas en aquella época, me regalaron un Meccano. Para aquellos que no lo conocen, es un kit con piezas de metal y tornillos, con el cual se puede construir una gran cantidad de modelos.
Aquel juguete, sin saberlo, revolucionó mi imaginación y creatividad y me hizo sentirme capaz de inventar y construir algo. Fue un laboratorio para experimentar qué tipo de estructuras podrían funcionar mejor, y además activó mi lógica y mi capacidad de resolución de problemas.
Todo eso fue determinante en mi vida, pues esas habilidades que adquirí jugando son hoy gran parte de las que utilizo en mi profesión, la cual, además de darme de comer, me apasiona.
No sabemos con claridad cuáles serán los trabajos del futuro, pero podemos predecir que el uso de la tecnología, la creatividad y la imaginación, aplicadas a la resolución de problemas, va a estar presente en cualquiera de las profesiones que tengamos.
Dar herramientas a nuestros niños para ese futuro va a ser lo mejor que podamos hacer por ellos, y el modo más efectivo será hacerlo de un modo divertido y que ellos disfruten, como ocurre a través de un juguete.
Con la idea de que los juguetes que pongamos al alcance de nuestros niños determinarán parte de su futuro, compartimos algunos ejemplos de juguetes STEAMi que pueden regalar a cualquier niño o niña, sin importar el género.
Existen muchas marcas y modelos de robots programables. Colby, ratón programable es un ejemplo económico, con el que, además de aprender las bases de programación mediante el establecimiento de secuencias, se estimula la creatividad al construir obstáculos.
Al ocurrir fuera de la pantalla, la experiencia del aprendizaje se vuelve tangible y kinestésica. Este tipo de juguetes se recomienda a partir de los cinco años. Algunos otros ejemplos de este tipo son:
- Robots programables para preescolar: Kubo / muTiny
- Robots programables para primaria con algunos sensores incluidos: BOTLEY, DASH, Codey Rocky, Sphero.
- Tarjetas con microcontroladores programables para desarrollar proyectos de programación, robótica y electrónica de primaria alta en adelante: Makey makey, micro:bit, Arduino starter kit.
Los juguetes de arte nos hacen crear y desarrollar nuevas conexiones cerebrales, que favorecen el tipo de pensamiento lateral que es libre y creativo. Historias, personajes, formas y colores nos ayudan a desarrollar ideas únicas y diferentes que nos serán útiles en cualquier ámbito en el que nos desarrollemos en el futuro.
Story Cubes es el ejemplo de un juego que desarrolla todo el potencial de la imaginación, es tan sencillo como tirar unos dados con figuras distintas y contar historias nuevas con ello, puede jugarse en equipo o de forma individual.
Algunos otros ejemplos de juguetes que pueden desarrollar tus habilidades en el arte y la imaginación en primaria alta son: Bloxels / Expression puzzle / Vango UpsidedownChallengGame / STEAM Paper Flower Science Kit / Light up tracing pad / Rainbow catcher.
Los juegos de ciencia nos ayudarán a experimentar y desarrollar la curiosidad, que es la base de cualquier aprendizaje, además de sorprendernos con lo mágico que puede ser el mundo que nos rodea.
Un ejemplo puede ser Scintia KIB, un kit de introducción a la biotecnología que, mediante prácticas guiadas con materiales, nos ayudará a vivir todo un proceso científico y a desarrollar habilidades como la observación y el análisis, útiles para cualquier profesión.
Otros juguetes para la ciencia que pueden ser utilizados desde primaria alta son: VR Science lab / Eyeclops / Foldscope / Thinkybox / Discovery Mindblow.
Este tipo de juegos nos ayudan a desarrollar el pensamiento vertical, crítico, lógico y analítico. Un ejemplo de ello es Crozzit, un juego de estrategia en el que el primer color en llegar al otro lado gana.
Otros que entran en esta categoría son, para preescolar y primaria baja: Monster math scale / Juego de lógica Ardillas; y para primaria alta: Master-mind, Hacker cybersecurity logic game, Genious Square.
Por último, mencionaremos los juegos que desarrollan un poco de todas las habilidades anteriores: imaginación, creatividad, trabajo en equipo, análisis, pensamiento lógico y habilidades constructivas.
Los afamados Legos u otras marcas y modelos como Brio, en donde un conjunto de piezas con características y formas distintas puede llevarte a construir cualquier cosa que imagines.
Otros ejemplos de kits para construcción pueden ser: Gravity maze / Solar Robot Kit / Lego Chain Reactions / Hexbugs / Suspend.
Para finalizar, queremos decir que estos no son los únicos juguetes existentes en el mercado, hay muchas marcas y modelos que cumplen funciones similares, pero nuestro objetivo es ampliar la visión y variedad de juguetes que ponemos al alcance de nuestro niños y niñas para extender su realidad y sus habilidades.
Imagino que alguna niña podrá crear un mundo imaginario en el que un robot pueda cuidar de su muñeca, jugar a que su muñeca construya una nave para viajar a Marte o desarrollar un automóvil con una movilidad ecológica. Así que cada vez que regales un juguete pregúntate: ¿qué tipo de realidad quieres que construyan los niños y niñas?
Con información de:
—Tendencias y factores de influencia en el consumo de juguetes y dispositivos tecnológicos. N. Herrera / Universidad EIA (Colombia, 2015).
https://eia.edu.co/bitstream/Herrera_2015_TendenciasFactoresInf.pdf
—Los juguetes Berilio: una experiencia de transmisión de conocimientos científicos en educación infantil.
https://www.quimicaysociedad.org/wp-content/aprendizaje_activo_de_la_fisica_y_la_quimica_3.pdf
—El juego y los juguetes: un derecho olvidado de los niños. A. Loredo A., M. Gómez J. y A. Perea M.
http://189.203.43.34:8180/handle/20.500.12103/1773
—Influencia de los juguetes electrónicos en el desarrollo del lenguaje en educación infantil. B. Arroyo E. Universidad de Palencia (España, 2016).
http://uvadoc.uva.es/bitstream/handle/10324/21083/TFG-L%201471.pdf